Según un informe del Banco Mundial, la productividad laboral en México ha experimentado un crecimiento anual promedio del 1.2% en la última década. Aunque esta tasa es más baja en comparación con otros países de la región, indica un progreso constante en la optimización de los recursos laborales en la economía mexicana.
La productividad laboral se refiere a la capacidad de una persona o equipo para realizar y completar tareas de manera eficiente, obteniendo resultados de calidad en un período de tiempo determinado. Este concepto de productividad implica la habilidad de gestionar el tiempo de manera efectiva, establecer objetivos claros, utilizar habilidades y conocimientos de manera eficiente, y adaptarse a los desafíos y demandas del entorno laboral.
Definir productividad es crucial para entender cómo mejorar los procesos de producción y medir la productividad en una organización. Además, la productividad y eficiencia son aspectos fundamentales para el crecimiento y éxito de las organizaciones, así como para el logro de objetivos individuales y colectivos.
La productividad laboral ofrece una serie de beneficios tanto para los individuos como para las empresas. A continuación, te presentamos algunos de los beneficios clave:
En resumen, la productividad laboral trae una serie de beneficios tanto para los colaboradores como para las empresas, incluyendo una mayor eficiencia, rentabilidad, calidad, satisfacción, desarrollo profesional, equilibrio y competitividad empresarial. Es un elemento esencial para el crecimiento y el éxito en el entorno laboral.
Empresarios y colaboradores tienen, por igual, la aspiración de poder llevar un balance entre su vida personal y profesional. No obstante, existe un erróneo concepto en la cultura laboral del país que consiste en pensar que los trabajadores que pasan más horas en la oficina son, de hecho, los que tienen mayor productividad laboral.
La realidad es que equilibrar todas las actividades personales y profesionales no es una tarea fácil; requiere de esfuerzo, comunicación, respeto y constancia entre el empleador y el trabajador. Por otro lado, se ha demostrado que llegar al puesto de trabajo con la mente relajada permite que los resultados en la oficina se incrementen notablemente. El clima laboral y un equilibrio personal son factores que afectan directamente la productividad.
Implementar modalidades de trabajo con horarios flexibles permite a las personas liberar estrés y llevar niveles de vida más productivos, ya que el trabajo se convierte en “algo que hacen” y no “un lugar donde van”. Este tipo de medidas contribuyen al aumento de productividad y a un mejor equilibrio personal.
Para incrementar tu productividad laboral con una vida más saludable en ambientes laborales te recomendamos:
El horario de comida es indispensable para todos, ya que no sólo es el momento de consumir alimentos, sino que también nos permite tener un tiempo de relajación durante el horario laboral, permitiéndonos convivir con otros compañeros y liberar la mente durante la jornada laboral.
No cometas el error de comer en el escritorio, ya que esto significa pasar un mayor tiempo frente a la computadora, lo que puede afectar la calidad de vida y la salud. Aprovecha este tiempo para platicar de otros temas con tus compañeros o bien, sal a caminar un poco para tomar aire fresco.
Realizar ejercicio te permitirá liberar estrés, manteniéndote en forma física y mentalmente. El ejercicio regular es un factor que influye en la productividad de manera positiva, ya que mejora el estado de ánimo y la capacidad de concentración.
Habla con tus empleados o patrones y establece en conjunto los objetivos del trabajo para enfocarse en un trabajo eficiente. Con una buena organización, se podrán alcanzar los objetivos sin tener que hacer horas extra. La toma de decisiones correcta y la medición de la productividad son claves para lograr un balance adecuado entre resultados y tiempo invertido.
Siempre habrá trabajo por realizar y temporadas en que la carga sea muy alta. Aunque esto suceda, haz lo posible por tomar unos días de descanso. Evaluar el desempeño incluye considerar el tiempo de recuperación y descanso como una parte fundamental de la productividad a largo plazo.
La tecnología ha jugado un papel muy importante en la productividad de las personas, pero al mismo tiempo ha provocado que los empleados siempre estén disponibles, sin importar cuándo y dónde se encuentren. Respeta tu tiempo libre sin responder correos electrónicos o llamadas, y permite que tu mente se desconecte del trabajo.
Nuestras actividades personales y laborales tienen diferente importancia en nuestra vida. Por un lado, nuestra familia es algo que requiere de nuestra atención y que siempre estará con nosotros; por otro, el trabajo nunca terminará y estará cambiando constantemente por decisión de los clientes, jefes o por encontrar alguna oferta mejor. Es importante establecer horarios y un equilibrio que nos permita atender todas nuestras prioridades, lo que a su vez mejorará nuestra productividad en el trabajo.
En conclusión, pasar más horas en el trabajo o la oficina no significa una mayor productividad laboral ni el éxito profesional de una persona. Lo importante es lo que realmente se está haciendo en el puesto de trabajo. Cuidar de nuestra salud física y mental es clave para poder rendir en nuestro trabajo, para ello, es necesario darle la importancia que se merece a nuestro tiempo libre y a la calidad de vida.
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